Este fin de semana he reciclado la carpeta escolar de mi hija Rosa. La pobre estaba muy desgastada, sobe todo por las esquinas, de tanto uso. Y es que la ha utilizado durante dos cursos escolares seguidos, y claro, necesitaba una reparación intensiva.
Inicialmente pensé en comprarle una carpeta nueva a mi niña, pero luego planeé intentar recuperarla forrándola con una tela bonita y así personalizarla. Y es que el scrap te permite recuperar objetos viejos y alargarles su vida útil con una buena dosis de "chapa y pintura", jeje, jeje...
Olvidé hacerle una foto a la carpeta antes de forrarla para que hubierais podido ver el antes y el después. Pero de todos modos, os muestro unas fotos del resultado final. A Rosa le ha encantando y al ser una carpeta de tela será mucho más fuerte y duradera.
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